lunes, 9 de mayo de 2011

Es dificil calificar esta estupidez de 'Sur Madrid'



He escrito mucho sobre el asunto, así que aquí me resulta imposible volcar todo para desmontar esta estupidez caprichosa y de chiquillos bromistas de parvulario, que recoge el titular citado. Así que me permitirán solo un apunte muy pequeño.

Somos el 2º país en deuda PRIVADA del mundo, con una de las primeras burbujas inmobiliarias del planeta, que metió ingentes recursos en arena y ladrillo, elevando sus precios hasta las nubes.

Las inversiones de dinero que aquí no había, fueron pedidas en préstamo al exterior por los bancos y las cajas y empresas inmobiliarias, saltándose toda norma conocida hasta entonces de control de riesgos. La situación la agravaron extraordinariamente al apalancar en mucho esas inversiones aumentando considerablemente los riesgos del sector inmobiliario y más importante aún, del sector bancario, que no necesitó de las ‘subprime’ internacionales del primer momento, para quedar fuertemente dañado por nuestra burbuja inmobiliaria y de crédito.

Los recursos invertidos que no teníamos y nos prestaron de fuera, no se destinaron a mejorar nuestro sistema productivo, no fueron a la industria ni al sector servicios, necesitados de recursos para modernizarse lo que provocó una caída monumental de competitividad de toda nuestra economía, lo cual impidió e impide que podamos exportar lo necesario para competir en el mundo globalizado.

Cuando la burbuja inmobiliaria estalló, arrastró con ella al sector de la construcción y cientos de miles de empleos, que a su vez arrastraron todos los sectores industriales vinculados con ella, que a su vez arrastraron más paro y provocaron un derrumbamiento de la demanda interna, lo cual afectó a todos los sectores de producción y servicios.

El súper excesivo endeudamiento de familias, empresas y bancos, junto con la crisis financiera internacional, frenó en seco la capacidad de préstamos a la economía española. Se acabó el dinero (seguirá por un tiempo este gravísimo problema) y además se agravó porque nuestros prestamistas (Bancos e inversores internacionales) empezaron a pedirnos devoluciones y garantías de capacidad de devolución. (Resultaba gracioso para nuestros prestamistas que inmobiliarias españolas intentaran comprar empresas europeas, con dinero prestado por ellos, apalancadas en exceso, sin activos suficientes de garantía, en definitiva sin capacidad de devolución del mismo)

Al estallar la burbuja inmobiliaria los precios de los activos inmobiliarios, casas y suelo, se derrumbaron realmente, aunque de cara al interior las cifras de balances de inmobiliarias de bancos y cajas no reflejen estos derrumbes de precios, todavía, pero, evidentemente son visibles desde el exterior. Muchos suelos no valen casi nada, muchos edificios valen menos de la mitad de su precio de 2007.

Al derrumbarse estos precios inmobiliarios, y desaparecer el dinero de la escena mundial, arrastraron los precios de otros activos, fueran reales o financieros, fondos, inversiones en bolsa, que a su vez se agravó por la caída de precios de activos internacionales en todo el mundo. De repente la economía española perdió un 20 % de su valor, aunque las causas que lo motivaron fueron generadas durante años por mucha, mucha, gente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario